
Trata de que Manco Capac y Mama ocllo, pareja de esposos, hijos del dios sol nacen de las espumas del lago Titicaca, con la misión de fundar la capital del futuro imperio en un lugar fértil, este lugar quedaría donde se hundiría el báculo sagrado de Manco Cápac, cosa que sucedió en el valle del río huatanay, en Cusco.
Sin embargo, al carecer de una tradición oral, a no ser de aquella que se inició con la publicación de Comentarios reales de los incas, obra del Inca Garcilaso de la Vega, la autenticidad de esta leyenda como leyenda inca se pone en duda. Algunos afirman inclusive que Garcilaso fue el autor intelectual de esta leyenda cerca del año 1609.
Sin embargo, al carecer de una tradición oral, a no ser de aquella que se inició con la publicación de Comentarios reales de los incas, obra del Inca Garcilaso de la Vega, la autenticidad de esta leyenda como leyenda inca se pone en duda. Algunos afirman inclusive que Garcilaso fue el autor intelectual de esta leyenda cerca del año 1609.
La primera etnia inca en Cusco no era nada más que una caravana de inmigrantes llegados del reino altiplánico Tiahuanaco.
Este estado de habla puquina fue invadido y asaltado por enormes oleadas militares procedentes del sur, lo que actualmente es Tucumán al norte de Argentina y Coquimbo, al norte de Chile. Dichos invasores serían la etnia conocida como los aimaras.
No se sabe con exactitud que motivó a los aimaras a buscar mejores tierras al norte y desplazar a los tiahuanaco, probablemente fueron cambios climáticos, o quizá la invasión de otros pueblos.
Cualquiera que sea la causa, los aimaras atacaron repentina y contundentemente logrando ganar todo el territorio del Collao para ellos, mientras tanto los Taipicala o tiahuanacos se vieron obligados a emigrar por el norte. Hay evidencias arqueológicas descubiertas por Francis de Castelnau en 1845 y confirmadas por Max Uhle de que Tiahuanaco fue atacado cuando esta estaba poblada, pues se hallaron construcciones sin completar, como se aprecia en la imagen de arriba.
Este estado de habla puquina fue invadido y asaltado por enormes oleadas militares procedentes del sur, lo que actualmente es Tucumán al norte de Argentina y Coquimbo, al norte de Chile. Dichos invasores serían la etnia conocida como los aimaras.
No se sabe con exactitud que motivó a los aimaras a buscar mejores tierras al norte y desplazar a los tiahuanaco, probablemente fueron cambios climáticos, o quizá la invasión de otros pueblos.
Cualquiera que sea la causa, los aimaras atacaron repentina y contundentemente logrando ganar todo el territorio del Collao para ellos, mientras tanto los Taipicala o tiahuanacos se vieron obligados a emigrar por el norte. Hay evidencias arqueológicas descubiertas por Francis de Castelnau en 1845 y confirmadas por Max Uhle de que Tiahuanaco fue atacado cuando esta estaba poblada, pues se hallaron construcciones sin completar, como se aprecia en la imagen de arriba.
Si hariamos un retroseso a nuestros antepasados veriamos los cambios k se sucito en este siglo y ls leyendas dos dan una enseñanza grande de como eran los individuos en esas epocas ...
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